Volver de vacaciones, incorporarse al trabajo y que llegue una ola de calor a la ciudad es lo peor que te puede pasar para acentuar tu «depresión post-vacacional».
Por fortuna, podemos aplacar estos calores con refrescos caseros, ricos, sanos y con cero calorías. Os traigo una propuesta que no os dejará indiferentes, un agua de lima con aroma de apio y jengibre, que, si bien puede parecer una combinación algo exótica de ingredientes, os aconsejo a que lo probéis porque el resultado es una especie de limonada muy suave.
Además esta bebida tiene jengibre y apio, ingredientes con un montón de propiedades. Ambos son digestivos, útiles para el tratamiento de afecciones grastrointestinales, entre otras cosas, y el jengibre es ligeramente estimulante lo que en verano nos viene fenomenal para estar un poco más activos.
Es muy muy fácil de hacer! Los ingredientes que necesitamos son:
La preparación es muy sencilla:
1. Trocear todos los ingredientes sólidos (lima, jengibre, apio y sal) en una licuadora potente junto con 250 g de agua y triturar hasta que todo quede bien fino.
(Si tenéis thermomix, introducir todos los ingredientes troceados en el vaso y programar 20 seg a velocidad progresiva 5-10).
Si no tenéis licuadora, podéis rallar la cáscara de las limas, extraer el jugo, y jungo con el agua triturar el resto de ingredientes con una batidora.
2. Colar la preparación anterior con un colador fino. Al líquido resultante añadir el resto del agua y mezclar bien.
3. Servir muy frío y/o con cubitos de hielo.
Y a seguir disfrutando del verano!!!
Que rica parece con esos ingredientes, en cuanto me haga con un par de limas la pruebo, jeje
Besote!!!!